Dentro de dos semanas, la población votará si se deben ampliar las autopistas en tramos particularmente concurridos, como los que se encuentran alrededor de Ginebra, Berna, Basilea, St. Gallen y Schaffhausen. Se estima que los costos estatales ascienden a cerca de 5 mil millones de francos. La cuestión de si esta inversión puede ser financiada exclusivamente por el Fondo de Carreteras (NAF) es actualmente objeto de acalorados debates. Evidentemente, ni siquiera en círculos gubernamentales hay consenso. El ministro de transporte del SVP, Albert Rösti, quiso destacar en el folleto informativo sobre la votación, citando la ley de libertad de información, que la ampliación de autopistas sería realizable sin nuevos impuestos, como lo informó "Schweiz am Wochenende". En contraste, la ministra de finanzas del FDP, Karin Keller-Sutter, corrigió esta afirmación, eliminando la parte de "sin nuevos o adicionales impuestos" de la documentación de la votación. Existen documentos que también mencionan esto, los cuales están en posesión de la redacción. En su informe de 2022, el consejo federal aún consideraba que las reservas del NAF disminuirían en los próximos años al punto de que para 2027 podría ser necesario un aumento en el precio de la gasolina. Si estas caen por debajo de 500 millones de francos, la política deberá aumentar 4 céntimos por litro el impuesto sobre hidrocarburos. "Esto podría ser malinterpretado" Albert Rösti ha enfatizado en repetidas ocasiones en las últimas semanas que no existe una conexión entre el proyecto de ampliación y el aumento del precio de la gasolina. Aseguró tanto en una entrevista con "20 Minuten" como en el programa "Arena" de SRF que no es necesario aumentar el impuesto al combustible para los seis proyectos de ampliación.
Ahora, en una entrevista con "Schweiz am Wochenende", habló sobre la división entre los ministerios de finanzas y transporte. Declaró que mediante un cambio en las prioridades se puede evitar el aumento del precio de la gasolina, y que ya espera una mejora en la situación de los fondos viales para 2030, ya que desde entonces los vehículos eléctricos también estarán gravados. Además, según Rösti, no es sorprendente que el ministerio de finanzas busque mayores ingresos. Debido a la situación geopolítica, los precios de la gasolina ya fluctúan, en otras palabras: "Incluso en caso de rechazo de la propuesta, el precio de la gasolina podría aumentar." Jon Pult, diputado del SP y opositor a la ampliación, se muestra indignado: "Cuanto más se gasta, mayor es el riesgo de subfinanciación. Rösti trata de oscurecer y ocultar esto, simplemente lo niega." Lo considera molesto e injusto que tomó semanas, e incluso presión, para que el público se enterara de que realmente hay una conexión entre la ampliación de la autopista y los precios de la gasolina. "Esto demuestra cuán opaca es la manera en que trabajan." Además, según Pult, se espera que los costos del proyecto de ampliación superen también los 5 mil millones de francos, "esperamos al menos mil millones más". Es evidente que la gasolina se encarecerá, lo que afectará principalmente a la población rural, que depende del automóvil, mientras que los habitantes de las ciudades se oponen a la ampliación debido al aumento del tráfico. "Propaganda antes de la votación". Philipp Kutter, diputado de centro, considera este debate como un ejemplo clásico de propaganda en la última fase antes de la votación. Dice que hay muchas razones por las que los precios de la gasolina podrían aumentar, siendo la más importante el avance de los coches eléctricos sobre los motores tradicionales. Es optimista en que este problema de financiación estructural se solucionará para 2030, con un consenso amplio al respecto. "De todos modos, es una simplificación afirmar que el fondo nacional de carreteras se encuentra en una situación difícil debido a la ampliación planificada. Esto simplemente es parte de la lucha por la votación. Ahora están tratando de asustar a los automovilistas."
